En todos los Estados Unidos hay programas de asistencia en efectivo diseñados para ayudar a los supervivientes de abusos domésticos a cubrir necesidades básicas como la alimentación, la vivienda y el transporte. La forma más rápida de encontrar programas de asistencia en efectivo en su zona es ponerse en contacto con un proveedor local de servicios directos.
A través de los proveedores de servicios directos, puedes reunirte con defensores formados que pueden ofrecerte un apoyo confidencial y empático para ayudarte:
- Inscribirse en los programas gubernamentales de ayuda económica
- Acceder a fondos de ayuda monetaria específicos para supervivientes
- Conéctese con organizaciones que ayudan a compensar los costes de la seguridad mediante vales, regalos y servicios gratuitos
Los defensores pueden hacer que la navegación por los programas de asistencia monetaria resulte menos abrumadora y proporcionar la seguridad de que puedes y vas a mantenerte a ti mismo.
Programas de compensación del ahorro
Otra forma de acceder a más dinero es a través de los programas de igualación de ahorros. Una opción nacional es el Programa de Igualación de Ahorros de FreeFrom, que ayuda a los supervivientes a aumentar un colchón de ahorro de 500 dólares. El programa de FreeFrom está basado en un fideicomiso, en el cual los sobrevivientes reportan sus ahorros cada mes a FreeFrom. FreeFrom igualará hasta $40/mes x 6 meses + un bono de inscripción de $20 sólo por participar.
Protégete
Cuando no pueden obtener asistencia en efectivo, muchas personas piden dinero prestado para llegar a fin de mes. Si determina que necesita pedir dinero prestado, es importante protegerse de los prestamistas abusivos.
Los prestamistas depredadores atraen a las personas vulnerables con préstamos con condiciones injustas, engañosas o abusivas. Suelen utilizar tácticas agresivas y engaños para engañar a las personas y hacer que pidan préstamos que no pueden pagar. A continuación se indican las medidas que puede tomar para evitar a los prestamistas abusivos:
- Infórmate. Infórmate sobre los préstamos, los tipos de interés y las condiciones, para poder identificar más fácilmente las señales de alarma. Un recurso educativo que nos gusta es el juego online Shady Sam, que te ayuda a practicar la comparación de préstamos.
- Considere alternativas. Antes de pedir un préstamo costoso, considere la posibilidad de recurrir a un familiar o amigo de confianza. Además, muchas cooperativas de crédito ofrecen pequeños préstamos a corto plazo llamados préstamos alternativos de día de pago. Si eres socio de una cooperativa de crédito desde hace al menos un mes, a menudo puedes pedir prestados entre 200 y 1.000 dólares por un plazo de uno a seis meses.
- Trabajar con un defensor. Los defensores de la violencia doméstica pueden orientarte hacia instituciones de confianza que te apoyen económicamente.
- Haz muchas preguntas. Si eliges un prestamista con el que te gustaría pedir un préstamo, asegúrate de que entiendes todos los detalles del acuerdo de préstamo, incluidos los tipos de interés, los calendarios de pago, las penalizaciones y las comisiones adicionales. Aunque es ilegal, los préstamos abusivos son una realidad, y algunas instituciones sin escrúpulos no dejan de intentar conseguir tu dinero como sea. Algunas cosas a las que hay que prestar atención son que el prestamista le pida que firme un documento en el que renuncie a cualquiera de sus derechos, o que le entregue un contrato que contenga espacios en blanco.
- Prepárate para marcharte. Si se siente incómodo o detecta señales de alarma, no firme ningún documento, aunque esté a punto de cerrar. Es mucho mejor empezar de nuevo con una institución crediticia honesta, que quedar atrapado en una situación de préstamo depredador durante años. Hay prestamistas que pueden intentar presionarle mediante la culpa o la vergüenza, sobre todo si creen que el acuerdo se está cerrando. Sepa que este tipo de manipulación es inaceptable y, de hecho, es ilegal, y puede salirse con cero repercusiones. Si quiere saber más sobre las prácticas de préstamos abusivos y cómo evitarlas, haga clic aquí.